El Poder de Ser Semilla
Quienes vivimos en el campo sabemos lo importante que son las semillas. Sin semillas un campesino no tendría como hacer productivo el campo. Las distintas partes de una planta tienen propiedades muy especiales, pero las semillas a su vez tienen sus propiedades medicinales.
Cada semilla es inteligente y cuando las condiciones para su supervivencia están dadas empiezan a brotar. Los germinados elevan las propiedades del grano y son mucho mas beneficiosas.
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«En verdad, en verdad os digo: si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto.
El que ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo, se guardará para la vida eterna. El que quiere servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo honrará».
Es necesario dejar de ser grano...dejar de ser semilla. Morir sabiendo que tenemos todo un potencial para germinar en el lugar donde nos plante el Señor. Es necesario germinar en una familia, en una relación de pareja, germinar con los hijos y la comunidad solo allí daremos una cosecha, solo allí daremos los frutos para agradar a Dios.
Cuando la semilla encuentra las condiciones brota de la tierra, asciende, busca la luz y también busca en lo profundo para echar raiz y sostenerse. Cuantos de nosotros estamos a punto de dejar de ser semilla, dejando atrás un periodo de latencia para empezar a crecer y desarrollarnos espiritualmente. Dejar a un lado nuestra comodidad de ser semilla y arriesgarnos a brotar en medio de muchas variables que podrán afectarnos. Dos cosas me han impactado de la selva de cemento y es que la naturaleza, la semilla llevada por los mismos pájaros en la pared de un puente crece y la otra en una alcantarilla que le robaron la tapa sale una planta. Tal vez los lugares donde estemos sean los más adversos, pero la vida brota, la vida misma se abre camino para salir adelante y seguir creciendo hasta dar fruto o morir en el intento.
Dejar a un lado nuestro egoismo y salir del caparazón de semilla con todo el potencial que tenemos para servir, desgastarse sirviendo y amando, amando y sirviendo es la razón por la cuál estamos en este mundo. En el afán de servir nos despojamos de todo. En el afán por servir salimos de nuestra zona de confort. en el afán por servir y amar a los demás estamos Sirviendo a Cristo y por ende estamos cumpliendo la Misión del Padre.
Seguir a Cristo implica Servir sin medida. Implica desgastarnos por hacer crecer el Reino de Dios. Que nuestro esfuerzo de brotar, crecer y desarrollarnos espiritualmente en el servicio sea para la Mayor Gloria de Dios.
Hoy es el dia de San Lorenzo, diácono, mártir de los primeros siglos. Que encontró el martirio por el Servicio a los demás. Que su ejemplo de vida nos fortalezca y nos lleve a Servir en el Amor.
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